La Navidad nos recuerda el mensaje extraordinario que nos invita a construir un mundo mejor de solidaridad y justicia.
Para tod@s, es una fecha que se disfruta en común, cerca de las personas que amamos, pero también es un momento de reflexión acerca de la manera en que vivimos.
La Navidad como tiempo de nacimiento nos invita al renacimiento de la conciencia con verdadera responsabilidad social, tolerancia, comprensión sin distinción de raza, credo o clase social, solidaridad y preocupación por el bien de los demás.
¡Con que facilidad podemos entender, que este tiempo nos predispone a muchas cosas!:
- Primero a sentir a la otra persona como importante, puedes recibir y dar cariño.
- Segundo, que desde su fe y la razón, puedes comprender el verdadero sentido de esta fiesta.
- Tercero, nuestra tradición es merecedora del mayor respeto.
Deja que tu vida la gobierne tu ALMA, no tu Ego

Recuperemos el “ espíritu de la Navidad ”, la voluntad y el deseo de paz y armonía, apaguemos el ego por un momento…
«Si mi sonrisa te sirve de adorno en esta Navidad cuenta con ella, si mi mano te es de ayuda tienes las dos y si mi corazón te trae felicidad es todo tuyo. La felicidad es la mezcla de sueños y realidades».
La Navidad va por dentro.
